Este barniz ecológico se puede utilizar en todo tipo de muebles y para barnizar o pintar puertas, aunque no ofrecen la misma calidad en los acabados que los sintéticos tradicionales, pues su composición es distinta.
Barnices convencionales
Los barnices convencionales son los más resistentes pero su vida es corta, les afectan los rayos ultravioleta que los deterioran, perdiendo su elasticidad y haciendo saltar la película de barniz. Esta película cierra el poro de la madera donde se utilice, por lo que no deja respirar a la madera, es decir, el vapor de agua queda bloqueado.
Otra contra que tienen los barnices convencionales son su coste, ya que para aplicar una nueva capa debemos decapar anteriormente la anterior.
Respecto al medio ambiente, estos barnices contienen compuesto orgánicos volátiles con efectos nocivos.
Los barnices ecológicos son la mejor opción frente a los convencionales.
Los barnices ecológicos están creados con materias primas de origen vegetal y/o mineral que ni contaminan cuando se fabrican, ni contaminan en su aplicación, además de no contener sustancias tóxicas.
Son ignífugos y no desprenderían gases tóxicos en caso de incendio. Su mantenimiento es inferior ya que aguantan más tiempo en buen estado y no cierran el poro, por tanto la madera puede respirar.
Finalmente, los barnices ecológicos son hidrófugos por lo que repelen el agua y ofrecen así una protección contra los agentes biológicos.